David se incorpora a Veolia en 1996, en especial, en la cadena de clasificación. A lo largo de estos años, pasa por diferentes puestos en el Grupo, hasta convertirse en responsable de un centro de clasificación. Actualmente trabaja en el centro de Châteaubernard*, se encarga de los residuos (especialmente plásticos) procedentes en gran medida de las bodegas de coñac de la región. Para David y su equipo los contenedores de residuos mezclados y los palés de botellas no tienen secretos. Juntos trabajan a diario clasificando los diferentes tipos de plásticos, un trabajo minucioso que es clave para una valorización óptima.
En esta tarea rigurosa puede contar con el profesionalismo de sus cuatro compañeros, con algunos comparte profesión desde hace más de veinte años. Este trabajo en equipo y su cohesión son esenciales en esta actividad, que puede provocar trastornos musculoesqueléticos.
De hecho, una de las metas de David: “Ayudar a mis compañeros a encontrar soluciones para mejorar sus condiciones de trabajo también forma parte de mis funciones.”
Esta visión de David cuenta con el apoyo de la dirección del centro, que concibe la salud y la seguridad en el trabajo como una prioridad. El 2016 David, convencido de que ganando altura se mejoraría la eficiencia, diseñó una plataforma elevadora. Este sistema aporta dos ventajas: facilita notablemente el trabajo en las tareas diarias y mejora la eficacia de las operaciones de clasificación en los palés de botellas.
Orgulloso de su invento, explica que “ahora el palé se levanta solo y así cada uno de sus niveles está a una altura óptima”. Después de una fase de experimentación y de adecuación a las normas, el prototipo se ha convertido en una máquina certificada que rápidamente “ha demostrado su utilidad”, destaca David.
David ha ido adquiriendo este sentido de la iniciativa a lo largo de su carrera profesional. De hecho, no es su única aportación, el 2008 ganó el concurso “Déclic” de Veolia. Recibió el premio a la innovación participativa con una propuesta que permitía mejorar los resultados de una máquina de clasificación óptica, para facilitar aún más el trabajo de los operarios.
* Además del plástico, el centro de Châteaubernard trata otros residuos (cartón, papel, madera, metales, etc.).